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Uso de los dilatadores FMS para el lichen sclerosus

Cuadro clínico: dilatador para lichen sclerosus

 
El lichen sclerosus es una enfermedad cutánea crónica no contagiosa, por lo general en la zona genital femenina; también pueden verse afectados hombres y niños. Todos los detalles los encontrarás en nuestra guía Lichen sclerosus – síntomas y tratamiento. Aquí explicamos el uso de los dilatadores FMS para la autoaplicación en lichen sclerosus.

¿Por qué dilatadores FMS en lichen sclerosus?

El tratamiento con dilatadores FMS en lichen sclerosus ofrece una ayuda eficaz y suave: la dilatación no se consigue abriendo simplemente, como con dilatadores tradicionales, sino mediante el suave efecto de masaje de las cabezas elípticas. Para ello, no es necesario introducir el dilatador por completo; basta con introducir y retirar alternativamente la cabeza elíptica, evitando así forzar zonas no implicadas. Además, el vidrio de borosilicato, extremadamente liso, se desliza prácticamente sin fricción. Estos factores permiten las muchas repeticiones deseadas, mantienen el tejido flexible y activan el metabolismo (celular) sin irritar las zonas cutáneas sensibles.
Los dilatadores FMS existen en 27 tallas a partir de 14 mm de diámetro. Si al comienzo fueran necesarias tallas inferiores a 14 mm, el principio FMS (flexibilización mediante efecto de masaje) dejaría de ser eficaz porque la diferencia entre cabeza y vástago sería demasiado pequeña. Para estos casos recomendamos nuestros dilatadores tipo bougie de acero para implantes: superficie pulida y sin poros, gran deslizamiento e higiene; el acero para implantes es 100 % biocompatible e incluso apto con alergia al níquel. Con incrementos de solo 1 mm a lo largo de más de 100 mm, dilatan con gran delicadeza hasta poder continuar el tratamiento con los dilatadores FMS a partir de 14 mm.

¿Un dilatador o un set?

En la fase inicial del lichen sclerosus, el masaje regular con un único dilatador FMS ya puede ayudar a prevenir el estrechamiento de la entrada vaginal por endurecimiento del tejido. La talla correcta es decisiva: un dilatador de vidrio demasiado pequeño ofrece un efecto de masaje débil o nulo; uno demasiado grande causa dolor y, por tanto, no es adecuado. Aun así, un set es siempre recomendable, ya que te permite ajustar a diario la talla a tu estado y a la intensidad de los síntomas, y aumentarla si lo deseas.

Si ya existen consecuencias de la enfermedad, el tratamiento con un set de dilatadores es en cualquier caso necesario, porque las zonas afectadas deben recuperar la flexibilidad muy gradualmente. Con un set puedes comenzar con tallas pequeñas y aumentarlas progresivamente a lo largo del tratamiento.

La talla adecuada

No es posible una recomendación universal sobre la talla ideal de un dilatador individual o de un set, porque la capacidad vaginal varía mucho y existen grados de gravedad/síntomas muy distintos.

Un set «estándar» para todas las mujeres y para cualquier situación no puede ser óptimo; por eso ofrecemos 27 tallas y recomendamos distintos sets. También puedes crear tu propio set personalizado. 

El primer paso para las mejores posibilidades de éxito es determinar la talla inicial correcta, preferiblemente mediante autoevaluación. Te damos consejos para elegir la talla adecuada.

Preparación mental

Es importante un ambiente agradable y tranquilo para que la sesión sea lo más cómoda posible. La estimulación erótica puede ayudar, al igual que la expectativa de mantener relaciones sin dolor. La imaginación y la anticipación son potentes impulsores de la curación.

¿Qué más necesito para la aplicación?

Para un tratamiento óptimo, poner el dilatador a la temperatura adecuada puede ser útil: el calor intenso relaja el tejido; el vidrio fresco calma el escozor agudo y alivia el dolor. Por eso, prepara un recipiente con agua fría o caliente. Tras poner a temperatura, seca brevemente los dilatadores de vidrio para que el lubricante no se diluya. Los dilatadores FMS más grandes, a partir de aprox. 26 mm, incluso pueden acondicionarse térmicamente de forma duradera gracias a su relleno; encontrarás los detalles en las instrucciones de uso. 

Los dilatadores FMS tienen un excelente deslizamiento. No obstante, es necesario un lubricante hipoalergénico de alta calidad para crear una película lubricante no irritante. 

Ten también a mano una toalla para secar tras el baño maría y para apoyar los dilatadores usados, y otra para limpiar tus dedos después de aplicar el lubricante, de modo que puedas realizar la sesión con calma y sin interrupciones.

Lo más importante: el masaje suave 

Lo ideal es una postura semisentada, reclinada, con las piernas abiertas y ligeramente flexionadas. Si es necesario, la sesión también puede realizarse de pie con un pie apoyado en un taburete o silla.

Empieza con una talla que puedas introducir cómodamente. A continuación, mueve el dilatador con suavidad hacia delante y hacia atrás para un ligero masaje. Lo más importante con el lichen sclerosus es introducir y retirar por completo la cabeza del dilatador de forma alterna. Así movilizas las zonas cutáneas principalmente afectadas alrededor de la entrada vaginal y las haces más flexibles, ya que los síntomas se concentran en la parte anterior de la vulva. Para ello, basta con mover solo la cabeza del dilatador al entrar/salir, es decir, en vaivén. Respeta tu umbral de dolor y no te excedas: aquí la paciencia es importante.

Solo los dilatadores FMS permiten este modo de uso, porque la parte más gruesa está delante y no detrás como en los dilatadores cónicos. Y, sobre todo, porque actúan en ambas direcciones: el tejido siempre se mueve alrededor de las cabezas elípticas y «fluye», inspirado en la naturaleza. 

Aumenta gradualmente la velocidad del movimiento para ganar eficacia. Este masaje y la movilización del tejido endurecido son más determinantes para el éxito que una dilatación máxima o la profundidad de inserción.

¿Cuándo aumentar la talla?

Cuando el movimiento de un dilatador no provoca dolor ni molestia, puedes continuar el tratamiento con la siguiente talla. Esto puede ocurrir ya en la primera sesión, pero en casos graves pueden ser necesarias varias. No te presiones: importa aceptar tu estado actual y tus necesidades. Con sets de pasos pequeños de 1 mm (hasta la talla 19) y 2 mm (desde la talla 20), el éxito suele llegar más rápido; con pasos mayores de 2 mm (hasta 19) y 4 mm (desde 20) se requiere un poco más de paciencia. Tu bienestar durante la aplicación determina por sí solo el ritmo y el progreso.

Frecuencia y duración de la aplicación 

La duración y la frecuencia dependen siempre de la fase actual de la afección. Durante un brote agudo, las sesiones suelen limitarse a lo necesario para mantener el estado y evitar el empeoramiento. Entre brotes, comprueba si hay cambios y actúa en consecuencia si hace falta. Evita pausas demasiado largas entre sesiones, ya que el endurecimiento del tejido también puede progresar de forma insidiosa. Como persona afectada, tú eres la mejor experta en tu cuerpo. ¡Sigue constante!

Hera Schulte Westenberg: asesoramiento terapéutico

Asesoramiento terapéutico gratuito

En «Preguntas frecuentes sobre dilatadores FMS» encontrarás más información y en nuestras guías tratamos otros temas específicos. Con gusto respondo preguntas de clientas/clientes sobre el uso de nuestros productos en situaciones individuales.

Contacto: hsw@theros.de

Firma de Hera Schulte Westenberg

Hera Schulte Westenberg