* NOTA: Aquí usamos el término “bolas kegel”, pero también se utilizan los términos "bolas Ben-Wa, bolas de Geisha, bolas vaginales, bolas de entrenamiento para el suelo pélvico", etc., que se ajustan al contenido de este texto.
En esta guía, como ex matrona y terapeuta certificada del suelo pélvico, te doy consejos sobre cómo utilizar las bolas kegel* durante la recuperación postparto para prevenir la debilidad del suelo pélvico o para un entrenamiento eficaz de la musculatura pélvica. Y sobre todo: cuáles de las innumerables bolas kegel* son realmente adecuadas y cómo funcionan. Las pocas que realmente cumplen con su función están disponibles no solo en sets, sino también individualmente. Las bolas kegel médicas certificadas* con eficacia probada tienen su precio, pero valen la pena.
Índice:
Tómate un momento para entender las conexiones:
El embarazo y el parto son procesos naturales para el cuerpo femenino, creado para esta función. Sin embargo, las cargas físicas durante este tiempo crean condiciones ideales para una debilitación del suelo pélvico. Por ello, recomiendo a todas las mujeres entrenar el suelo pélvico después del parto para prevenir su debilitamiento lo antes posible. Sin embargo, no recomiendo usar bolas kegel durante el embarazo.
Muchos fabricantes de juguetes sexuales han descubierto el “suelo pélvico” como un nuevo mercado. Aparecen constantemente productos con diseños atractivos y colores llamativos, prometiendo nuevas sensaciones eróticas y una mejora del suelo pélvico tras el embarazo.
Las diferencias de calidad entre las bolas kegel* son enormes, tanto en materiales como en la intensidad de vibración generada en su interior (que no se puede ver). Más adelante explicaré qué características deben cumplir para ser realmente efectivas en el entrenamiento del suelo pélvico tras el embarazo. Pero primero, empecemos con lo básico:
El suelo pélvico de una mujer realiza un trabajo increíble durante el embarazo y el parto: soporta un peso adicional considerable, además de sus funciones habituales de soporte de los órganos pélvicos, la postura erguida y el control de la vejiga y el intestino. Este peso adicional incluye no solo al bebé, sino también el líquido amniótico, la placenta y el útero en crecimiento.
Durante el embarazo, los ligamentos y tendones se vuelven más flexibles debido a las hormonas, lo que afecta al suelo pélvico. Para dar paso al bebé, el suelo pélvico debe ser fuerte y elástico al mismo tiempo. A nivel psicológico y espiritual, un suelo pélvico sano transmite una sensación de estabilidad interior.
En la sexualidad, una buena función de esta musculatura es clave tanto para la mujer como para su pareja. Por ejemplo, la mujer puede “abrazar” el pene o dar placer mediante contracciones musculares. Incluso una cesárea puede afectar al suelo pélvico, ya que los músculos abdominales están conectados con él y pueden debilitarse tras la operación.

Un suelo pélvico debilitado puede causar incontinencia urinaria en diversos grados. Esto es comprensiblemente incómodo y afecta la autoestima de muchas mujeres. Aunque la incontinencia fecal es mucho menos común, sus efectos son más graves en la vida diaria.
Deportes de alto impacto como correr, saltar o hacer trampolín deben evitarse tras el parto, ya que pueden empeorar la debilidad. (Nota: ¡el Nordic Walking con Viball® es excelente para fortalecer el suelo pélvico!)
Un suelo pélvico débil puede ir acompañado de malas posturas, dolores lumbares y, en casos graves, de prolapsos de órganos como vejiga, útero o recto, lo que también puede afectar la vida sexual.
Después del parto, el entrenamiento específico del suelo pélvico es fundamental. Un curso de recuperación postparto con una matrona es ideal, pero entrenar en casa con ejercicios y Viball® es igualmente eficaz.
Las bolas kegel*, a diferencia de los conos vaginales tradicionales, combinan peso y vibración interna para estimular el suelo pélvico. Las bolas de baja calidad, diseñadas como simples juguetes sexuales, no suelen ofrecer los beneficios necesarios para un entrenamiento terapéutico.
Las bolas kegel* eficaces deben cumplir con:
¿Medio juguete sexual, medio producto médico? ¡Mejor ambos! Los productos médicos como Viball® ofrecen mayor seguridad y también más placer.

La gama de seis tamaños permite una adaptación óptima al cuerpo y a cada etapa de la vida.
Las Viball® están diseñadas para ofrecer la máxima intensidad de vibración, gracias a su construcción y al acero quirúrgico que transmite las vibraciones de forma efectiva.
A diferencia del silicón, el acero quirúrgico es 100% biocompatible, hipoalergénico y fácil de limpiar. No absorbe olores ni bacterias.
Las Viball® son completamente redondas y se mueven suavemente en la vagina, lo que también ayuda a masajear cicatrices internas.
Sin cordones ni ranuras que acumulen bacterias, reduciendo el riesgo de infecciones postparto.
Puedes usarlas en cualquier lugar, incluso en la sauna o durante el ejercicio.
Viball® está certificado como producto médico, cumpliendo altos estándares de seguridad y eficacia.
Introduce las bolas con un poco de lubricante (ideal: pjur-med) y llévalas durante actividades diarias. Ejercicios como yoga, danza o caminatas suaves son perfectos. Evita deportes de alto impacto durante la recuperación.
Las bolas demasiado pequeñas pueden provocar tensión involuntaria para que no se caigan, reduciendo su eficacia. Cada mujer necesita un tamaño adecuado según su anatomía y experiencia. Aquí puedes saber cómo elegir tu talla.
Las Viball® cumplen con altos estándares médicos y de seguridad:
* NOTA: Aquí usamos el término “bolas kegel”, pero también se utilizan los términos "bolas Ben-Wa, bolas de Geisha, bolas vaginales, bolas de entrenamiento para el suelo pélvico", etc.
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