Si quieres entender cuál es el sentido de un masaje de próstata, lo primero es mirar de cerca la próstata y su función. Tal vez conozcas el término desde hace tiempo pero no sepas exactamente qué hay detrás. En el mercado existen muchos productos para la estimulación prostática, en su mayoría juguetes eróticos. Sin embargo, un masaje de próstata terapéutico es algo distinto — y esta diferencia es decisiva. Si ya sabes todo sobre la próstata y solo buscas herramientas adecuadas, al final de esta guía encontrarás recomendaciones directas.
Función de la próstata
Enfermedades frecuentes de la próstata
Efectos del masaje de próstata
¿Cómo funciona un masaje prostático?
“Ordeñar” la próstata y orgasmo prostático
Herramientas óptimas (FMS-Dilatadores, ProstaSphere)
Ejecución del masaje de próstata paso a paso
Apoyo adicional en la vida cotidiana
La próstata es un órgano del tamaño de una castaña en la pelvis, debajo de la vejiga y directamente sobre el suelo pélvico. La uretra pasa a través de ella. Antiguamente se llamaba “glándula prostática” porque las intervenciones quirúrgicas se hacían desde el perineo — así que “estaba delante” de la vejiga. Su función más importante: es una glándula que produce el líquido seminal del eyaculado. Junto con los espermatozoides de los testículos se forma el semen. Su localización y su tarea la convierten en un órgano central para el placer, la erección y la continencia; a menudo se la denomina “punto G masculino”. Cuando la próstata enferma, no solo afecta al cuerpo (por ejemplo, incontinencia o disfunción eréctil), sino también a la psique, la autoestima y la pareja.
1. Hiperplasia prostática benigna
Con la edad la próstata suele crecer. A partir de los 60 años la mitad de los hombres se ven afectados, a los 80 casi todos. Posibles síntomas: chorro urinario débil o interrumpido, retraso al iniciar la micción, goteo al final, necesidad frecuente e imperiosa de orinar (sobre todo de noche), a veces con urgencia incontinente. Las causas son cambios hormonales y de la edad; factores como predisposición familiar, sobrepeso, alcohol y tabaco, diabetes o hipertensión pueden influir. El tratamiento depende del caso: medicación, láser, cirugía o fisioterapia de apoyo.
2. Prostatitis
Una inflamación de la próstata causada por bacterias o virus. Los síntomas típicos son dolor en la parte baja del abdomen o en la zona anal; el semen puede verse amarillento o contener sangre. Las adherencias pueden dificultar la micción. La terapia incluye antibióticos, fisioterapia y a menudo un masaje prostático suave; en casos aislados se dilata la uretra bajo anestesia.
3. Cáncer de próstata
El cáncer más frecuente en los hombres. Detectado a tiempo es tratable, en estadio avanzado con metástasis es peligroso. La edad, la predisposición familiar, la alimentación y procesos inflamatorios pueden influir. Por eso es muy importante la prevención a partir de los 45 años. Los tratamientos incluyen cirugía, radioterapia y hormonoterapia; posibles efectos secundarios: incontinencia temporal y disfunción eréctil persistente.
Un masaje de próstata regular puede apoyarte en varios niveles:
– Prevención y terapia: puede aliviar molestias, por ejemplo en inflamaciones, y reducir el riesgo de enfermedades. Estudios muestran que los hombres con eyaculación frecuente (p. ej. 21 veces al mes) desarrollan cáncer de próstata con menor frecuencia que los hombres con menos eyaculaciones.
– Circulación y suelo pélvico: el masaje favorece la circulación, fortalece de forma indirecta la musculatura del perineo, mejora la continencia y puede reducir la necesidad de orinar por la noche.
– Placer y capacidad orgásmica: la estimulación prostática puede ser especialmente intensa — no solo porque la próstata es sensible, sino también porque el perineo y el ano son muy ricos en terminaciones nerviosas. Además, la próstata se encuentra cerca de la raíz del pene, a menudo infravalorada a pesar de ser muy sensible.
– Nivel emocional: un masaje consciente puede liberar tensiones y traumas antiguos, por ejemplo tras operaciones o experiencias difíciles.
Se puede acceder a la próstata de dos formas — indirecta y directa:
Indirecta a través del perineo: el perineo es la zona entre el escroto y el ano. Con movimientos circulares, presionando o acariciando suavemente, puedes estimular la próstata desde fuera. Es ideal para iniciarse, preparar el cuerpo para el masaje directo y ganar confianza en las sensaciones.
Directa a través del recto: la próstata se encuentra a unos 5–7 cm detrás del ano en la pared anterior del recto (hacia el abdomen). Con una herramienta deslizante o un dedo y abundante lubricante se palpa suavemente la glándula, empezando despacio y aumentando solo hasta donde resulte agradable. Son eficaces los movimientos circulares lentos, los impulsos de presión ligera y el gesto de “ven aquí”. Escucha siempre a tu cuerpo; detente si es incómodo y avanza poco a poco.
Por qué las herramientas son útiles: con los dedos el masaje suele ser cansado porque la muñeca debe torcerse de forma poco natural. Esto reduce la precisión y distrae. Las herramientas suaves y bien diseñadas facilitan la práctica, aumentan la comodidad y protegen las mucosas.
“Ordeñar” significa una estimulación más intensa de la próstata con el objetivo de drenar deliberadamente el líquido prostático y el semen — por motivos de salud, como juego erótico o para activar la próstata incluso sin relaciones sexuales. Para principiantes, lo más fácil suele ser el acceso rectal con un dedo lubricado o una herramienta; más raramente funciona externamente a través del perineo. Muchos hombres describen el orgasmo prostático como más profundo, prolongado y de todo el cuerpo; a menudo son posibles varios orgasmos seguidos con menor periodo refractario. En algunos casos puede haber eyaculación o liberación intensa incluso sin erección completa — al principio extraño, pero muy liberador.
¿Por qué es tan intenso? Además de la sensibilidad de la próstata, el perineo y el ano tienen una gran densidad nerviosa; la próstata está muy cerca de la raíz del pene, extremadamente sensible. Los estudios científicos son aún escasos; gran parte se basa en experiencias personales. Lo que sí se observa: cuanto más consciente eres de las sensaciones corporales y más abierto a nuevos estímulos, más pueden intensificarse el placer y la sensación global. Esta adaptación requiere tiempo — especialmente si la sensación de ser penetrado es nueva. Con atención, práctica y tu propio ritmo, la curiosidad puede convertirse en un camino satisfactorio hacia orgasmos prostáticos intensos.
– Fabricados en vidrio de borosilicato con superficie extremadamente lisa — muy respetuosos con los tejidos, incluso en uso prolongado.
– Cabeza de forma elíptica, anatómicamente ideal para los movimientos de masaje.
– Muchos tamaños para una adaptación individual; normalmente se recomiendan 24–40 mm para que la cabeza estimule bien sin exigir demasiado al esfínter.
– Uso cómodo en posición tumbada, sin torcer la muñeca.
– Dispositivo médico certificado.
– Desarrollada específicamente para el masaje prostático: dos esferas en un vástago delgado y ergonómicamente curvado.
– Superficie pulida espejo de acero implantable hipoalergénico: higiénico, duradero y sostenible.
– Permite un masaje preciso e intenso en distintas posiciones — incluso durante más tiempo, sin sobrecargar el esfínter o la zona anal.
– Elección de distintos tamaños de esfera para una estimulación ajustada.
Combinación de ambas herramientas: puedes preparar con FMS-Dilatadores (flexibilizar suavemente el ano) y luego realizar masajes más largos y precisos con ProstaSphere.
Tómate tu tiempo y crea un ambiente tranquilo y cálido. Masajea primero muslos, abdomen y zona lumbar, después glúteos y región pélvica para relajarte. El calor ayuda aún más: un baño de vapor pélvico —la variante “masculina” del Yoni Steaming— es ideal; el perineo y el ano se vuelven suaves y receptivos.
– Comienza con la estimulación indirecta del perineo. Haz círculos, presiona suavemente, siente hasta percibir reacciones claras.
– Para el masaje directo usa abundante lubricante. Introduce tu herramienta lentamente y palpa la próstata con cuidado. Alterna entre movimientos circulares, presión ligera y pequeños toques.
– Escucha a tu cuerpo. Las sensaciones pueden ir de extrañas a muy placenteras. Las pausas forman parte del masaje.
– Si tu pareja masajea, podéis combinar terapia y erotismo. El “cambio de roles” abre nuevas sensaciones; a menudo aparece una profunda relajación corporal — y a veces un orgasmo prostático.
Puedes reforzar la salud prostática también en tu día a día. Especialmente eficaces son las Viball® bolas chinas para hombres de acero implantable — discretas de usar y con una vibración muy intensa.
– Invisibles en el día a día o al hacer deporte
– Disponibles en tamaños de 36 a 60 mm
– Hipoalergénicas, higiénicas, duraderas, esterilizables
– Favorecen la erección — también durante el coito
– Dispositivo médico certificado
El masaje más la estimulación diaria se complementan de forma ideal: fomentas la circulación, la reacción muscular y la vivencia sexual — para más vitalidad, bienestar y calidad de vida.
Los comentarios se aprobarán antes de mostrarse.
por Hera Schulte Westenberg septiembre 16, 2025 5 lectura mínima
por Theros Erotherapy mayo 24, 2025 10 lectura mínima
por Hera Schulte Westenberg febrero 13, 2025 9 lectura mínima